Infidelidad Emocional (2)

Caso 1. Rebeca está casada hace diez años y dice que su esposo es muy sensible y afectuoso en la cama. A Craig siempre le ha interesado mi placer sexual tanto como el suyo. Siento que es importante para él que yo tenga un orgasmo, así que la mayoría de las veces mientras estamos haciendo el amor, cierro los ojos y me imagino que estoy con otro hombre. No es alguien que conozca, ni nada por el estilo. Es solo una cara y un cuerpo imaginario que me excita porque no lo conozco y eso me da una sensación de peligro, ¿sabes? El solo pensar que un extraño me seduce en algún lugar exótico me da ganas de tener relaciones. No puedo lograr tener estas ganas si lo único que hago es estar sentada en la casa con mi esposo. No es que él no sea atractivo, simplemente me excita más imaginarme una aventura peligrosa con alguien al que no tengo que recogerles del piso los calcetines.

Infidelidad emocional (1)

Hubo una época en la que tenía aventuras extramatrimoniales con cinco hombres diferentes.

Primero, fue Scott. Lo conocí cuando trabajaba de voluntaria en un campamento de verano. Scott era muy sociable, extrovertido y conversador. Lo primero que me atrajo fue su capacidad para conversar con cualquiera; no solo me refiero a una conversación superficial, sino a una discusión profunda y significativa. Si entraba en un cuarto donde él estaba, me daba toda su atención y me preguntaba cómo iba todo y cómo me sentía. En comparación, sin embargo, mi esposo era un hombre de pocas palabras, del tipo fuerte, silencioso.

Un matrimonio que comenzó mal

Desde que fue concebido, Sansón tenía una misión que cumplir “Porque el niño será nazareo a Dios desde su nacimiento, y él comenzará a salvar a Israel de mano de los filisteos” Jueces 13:5. Sansón, desde su nacimiento, debía llevar una vida de santidad, pero infortunadamente vemos que él hizo todo lo contrario. Jueces 14 y 15.

Escogió a la mujer equivocada

Sansón era un joven prominente, conocedor de las leyes de su pueblo y en edad casadera. Sus padres y su pueblo esperaban que escogiera como esposa a una delicada mujer piadosa de Israel, para que obedeciera el mandato de Dios de no casarse con extranjeros porque: “... desviará a tu hijo de en pos de mí, y servirán a dioses ajenos; y el furor de Jehová se encenderá sobre vosotros, y te destruirá pronto.” Deuteronomio 7:3

Pero lastimosamente no fue así. Sansón fue a Timnat, un pueblo pagano ocupado por los filisteos y  aunque la biblia no nos aclara a que descendió un hombre nazareo, dedicado a la santidad a una ciudad filistea, si sabemos que “vio en Timnat a una mujer de las hijas de los filisteos”. Sansón “vio”, se fijó, deseó a una mujer filistea. Fue donde sus padres y les declaró su decisión de tomarla por esposa. A pesar de las advertencias que ellos le hicieron, Sansón se empeñó en casarse en contra de la voluntad de sus padres y de la ley de Dios.

Orar según las escrituras (parte 3)


1. Ora para que seas sabia en tus conversaciones, escogiendo cada palabra cuidadosamente para fomentar el respeto por tu esposo y la iglesia, y para edificar a tus hermanas en Cristo. Ora para que sepas como responder ante el chisme y que siempre hables con bondad y compasión (Prov 11:13; 21:21; 31:26; 1Ped 3:10).

2. Ora para que sirvas a otros con el amor ágape de Dios y los impulses con Su sabiduría y compasión (Gal 5:13b; Fil 2:3-4; Prov 31:20).

3. Ora por unidad espiritual en la iglesia. Ora porque al enemigo no le sea permitido crear divisiones, contiendas o malentendidos de ninguna forma (Rom 14:19; 1Cor 12:25).

4. Ora para que seas cubierta con fuerza y dignidad. Ora para que tenga un espíritu gentil y cortés y represente al Señor tan bien como Su embajador (Prov 31:25a; 2Cor 5:20a; 1Ped 3:4).

Orar según las escrituras (parte 2)


1.   Ora para que Dios te de, a ti a tu familia, buenos amigos, que los exhorten, los  fortalezcan y les provean de compañerismo sincero, responsabilidad y tiempo de descanso (Sal 55:14; 119:63).

2.      Ora para que seas una mujer de oración y alabanza, que guíes mediante el ejemplo –enseñando a otras mujeres como caminar en una relación cercana con el Padre (1Tes 5:17; Hech 1:14a; Mar 1:35, Mat 4:10; Tito 2:4-5).

3.     Ora para que tomes decisiones sabias en tu estilo y protejas tu salud, especialmente en comer adecuadamente, hacer ejercicio y descansar lo suficiente. Ora por tiempos de relajación y renovación para balancear el estrés. (Rom 12:1-2; 1Cor 9:27; 6:19-20; 10:13; Prov 31:17).

4.     Ora para que estés en la Palabra de Dios y camines por fe en el temor del Señor –en lugar del temor al hombre. Ora para que no busques la aceptación de otros o se compare con ellos, sino que descubras la verdadera libertad en Cristo (Prov 19:23; 31:30; Heb 11:6, 2Tim 2:15; Sal 119:45; Ef 1:3-12).

Orar según las escrituras (parte 1)


1. Ora para que ames a Dios con todo tu corazón, alma, mente y fuerzas, para que el Espíritu de Dios trabaje en tu corazón en poder, y que valores y tengas prioridades bíblicas (Deut 6:5; Mat 6:33). 

2. Ora para que cultives un carácter fuerte e integridad absoluta, para que tu testimonio sea genuino, y que guarde su corazón (1Tim 1:5; 3:7; Prov 4:23).

3. Ora para por tu caminar personal con Dios, que tu alma y tu espíritu sean alimentados y fortalecidos, para que pases más tiempo leyendo la Palabra de Dios que libros y artículos cristianos (2Tim 2:15-16; Sal 119:7).

4. Ora para que puedas aconsejar y enseñar con discernimiento a través del uso sabio de la Escritura y fe en el poder de Dios (Sal 119:99; Sant 1:5-6).

Sexo: Diseño de Dios


La biblia describe a la unión entre marido y mujer como “una sola carne” (génesis 2:24) que significa “juntar “, “pegar”, “estar bien unido”. Para Dios la sexualidad dentro del matrimonio entre un hombre y una mujer, es igual de santa a la de orar o cantar en la iglesia, ya que fue diseñada por Él.

El diseño:
                              
Dios diseño el sexo en el matrimonio para la unidad:

La intención de Dios al crear el sexo fue para que, por medio del placer y la proximidad, se refuerce el vínculo físico e íntimo y que a través del gozo se atraigan tanto el esposo y la esposa a una unión profunda, que aumente la unidad y el compañerismo necesario dentro del matrimonio.

Dios diseño el sexo en el matrimonio para la procreación de la vida:

La intención de Dios al crear el sexo fue para que, su plan para la humanidad de “llenad la tierra y sojuzgadla” pudiera cumplirse. La procreación es un alto privilegio y responsabilidad que Dios le ha dado a la pareja para reproducir la vida.

Dirigiendo a Nuestros Hijos a Jesús

Por Richard D. Phillips

Una de las cosas más importantes que vamos a hacer en la Segunda Iglesia Presbiteriana es discipular a nuestros hijos en una fe viva y personal en el Señor Jesucristo. Vivimos en una sociedad que asume que cuando los niños crecen, van a deshacerse de las creencias y valores de la familia. Pero la Biblia ve las cosas de manera diferente. El libro de Proverbios dice que los años de la infancia tienen una influencia formativa que dura toda la vida: " Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él" (Proverbios 22: 6.).

¿Estoy invirtiendo en mi matrimonio?


“La mujer sabia edifica su casa, pero la necia con sus manos la derriba”. Proverbios 14:1

¿Estoy construyendo mi casa, o estoy derribándola?  Para responder esta pregunta debes examinar la forma como estas llevando tu hogar, las siguientes preguntas te harán reflexionar acerca de algunos puntos importantes en relación con tu esposo y tu casa.

¿Estoy invirtiendo en mi matrimonio?

¿Estás hablando palabras que animan, palabras que edifican y motivan, o estas destruyendo con palabras críticas, negativas, duras y demandantes? ¿Estas nutriendo el corazón de tu esposo? ¿Estás dedicando más tiempo, atención y esfuerzo en otras relaciones del que inviertes en tu matrimonio? la vida está llena de cambios y puede suceder que las circunstancias te lleven a cambiar las prioridades y dejes de invertir en tu hogar.


Las madres también necesitan teología


¿Qué es lo primero que piensas cuando escuchas la palabra teología?

¿Piensas en palabras impronunciables, en libros antiguos cubiertos de polvo, o tal vez en sermones largos? Si tuvieses que escoger entre estudiar teología y leer un libro de consejos prácticos para la vida diaria, ¿qué elegirías?

Para muchas madres como nosotras, la sola idea de estudiar teología parece estar más allá de lo que podemos manejar en nuestra vida diaria. Quizá pensemos: "En esta etapa de mi vida, no puedo aprender teología. Estoy sobrepasada por las tareas diarias de la maternidad, que consumen todo mi tiempo". Tal vez pensemos que podemos hacer mejor uso del tiempo leyendo sobre formas de ayudar a nuestro hijo a dormir, o sobre las mejores opciones nutricionales para nuestro hijo en crecimiento, o sobre cómo evitar que nuestro hijo en edad preescolar tenga una rabieta en medio de la fila de la caja del supermercado.