¿Pacto o contrato?

¿Cuántas veces en su vida ha firmado un contrato? De arrendamiento, de trabajo, o un crédito y ¿Cuántas veces los ha dado por terminado?...

Se ha vuelto cotidiano el firmar esta forma legal, pero lo preocupante no es que no exista credibilidad en la palabra dada, si no que el matrimonio se ha vuelto un contrato: promesas, responsabilidades, con condiciones (cláusulas), y duración determinada.

La sociedad se ha olvidado que el matrimonio (ese paso que una pareja da para dar lugar a una familia y ser una de las células de la sociedad) esta diseñado por Dios para ser un PACTO: promesas, responsabilidades, sin condiciones y sin límite de tiempo.

La pareja que vive su relación de matrimonio como un pacto será iniciadora de un hogar estable, con la determinación de dar todo de sí para crecer juntos y rodear a sus hijos y a ellos mismos de bienestar y aunque vengan las tormentas, permanecerá (sin condiciones ni límite de tiempo).
La diferencia entre un matrimonio que vive su relación de pareja como un pacto y no como un contrato está que en los primeros construyen una vida de servicio del uno por el otro, los segundos estarán juntos hasta que uno no resista al otro. (con condiciones y con limite de tiempo).

"...Pues porque el Señor actúa como testigo entre ti y la esposa de tu juventud, a la que traicionaste aunque es tu compañera, la esposa de tu pacto" Malaquias 2:14

REFLEXION:

Finalmente un individuo escoge libremente con quien se casa y su motivación principal debe ser el compromiso, entonces podemos preguntarnos, ¿por qué el matrimonio se ha vuelto un contrato mas?

¿Hasta que punto resistirá la sociedad el resquebrajar de sus familias?

¿Y las generaciones futuras, alcanzaran a conocer lo que significa un pacto matrimonial?.