EL MATRIMONIO: Un proyecto de vida

¡Estamos tan enamorados… nos vamos a casar! ¿Qué piensa una pareja cuando toma esta decisión? A muchos de nosotros se nos olvida que el matrimonio es una decisión que cambia la vida de los contrayentes, ya que es el inicio de un proyecto de vida en común.

Un matrimonio no puede ir a la deriva, sino que debe tener principios claros que le ayuden a alcanzar las metas y los sueños que como pareja se han propuesto realizar. Es importante tener un plan que sea identificado y anhelado por ambos, con respuestas claras a: ¿Dónde queremos llegar? ¿Qué queremos lograr? ¿Cómo lo haremos? ¿Cuál es el papel de cada uno? ¿Cumple nuestro proyecto el propósito que Dios tiene para nosotros?

Si ambos no tienen claro su proyecto de vida, probablemente se dejen llevar por las circunstancias del diario vivir y tomen decisiones que no conducen a ningún fin, dejan que lo secundario se vuelva importante, se concentren en mirar lo negativo y en cuales necesidades no están cubiertas; viven el presente sin construir un futuro.

“Los planes bien pensados: ¡pura ganancia! Los planes apresurados: ¡puro fracaso!”
Proverbios 21:5
Con el tiempo, posiblemente se darán por vencidos, dejarán atrás los sueños que alguna vez se propusieron realizar juntos y movidos muchas veces por el egoísmo y el orgullo, optarán por dividir su proyecto de vida en dos, atentando contra la unidad familiar y el compromiso adquirido en el pacto matrimonial.