¿Estoy invirtiendo en mi matrimonio?

“La mujer sabia edifica su casa, pero la necia con sus manos la derriba”. Proverbios 14:1

¿Estoy construyendo mi casa, o estoy derribándola?  Para responder esta pregunta debes examinar la forma como estas llevando tu hogar, las siguientes preguntas te harán reflexionar acerca de algunos puntos importantes en relación con tu esposo y tu casa.

¿Estoy invirtiendo en mi matrimonio?

¿Estás hablando palabras que animan, palabras que edifican y motivan, o estas destruyendo con palabras críticas, negativas, duras y demandantes? ¿Estas nutriendo el corazón de tu esposo? ¿Estás dedicando más tiempo, atención y esfuerzo en otras relaciones del que inviertes en tu matrimonio? la vida está llena de cambios y puede suceder que las circunstancias te lleven a cambiar las prioridades y dejes de invertir en tu hogar.

¿Expreso admiración y agradecimiento a mi esposo?

“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad”  Filipenses 4:8

Puede ser que pienses que tu esposo no es el mejor, que le faltan muchas virtudes y por eso no merece tu admiración, pero para ayudar a tu esposo y fortalecer tu relación con él es importante que le expreses tu admiración, piensa en las pequeñas cosas que él hace buenas y no en las incómodas, molestas o difíciles, por ejemplo, puede que sea un buen padre, un hombre honesto, o puede que no sea expresivo pero está pendiente de tus necesidades, o es un hombre responsable en el trabajo o tal vez es un buen líder, o leal con sus amigos; es muy importante para él que le expreses que lo amas, que con una sonrisa gentil conozca de tu boca las cosas buenas que piensas de él, habrá otras ocasiones para hablar de esas cosas que necesita mejorar.

Si cultivas el hábito de expresar admiración, aprecio y agradecimiento a tu esposo, se sentirá respetado y amado a pesar de sus múltiples defectos y esto impactará su corazón, lo afirmará y vera en ti la persona que lo ama a pesar de sus debilidades y pecados.

¿Estoy reservando lo mejor de mis energías físicas y emocionales para mi familia?

Muchas  mujeres están cansadas por todas las labores que hacen día a día, pero  muchas veces el problema es que dedican el mayor tiempo, esfuerzo y energía al trabajo, grupo social, iglesia, o en muchas actividades que son ajenas a su casa.

Entonces ¿Qué pasa con sus familias? están recibiendo una esposa o una mamá agotada, frágil, frustrada, molesta e impaciente porque ha estado bajo presión en algún otro lugar todo el día. Cuando las prioridades no están dentro de la voluntad de Dios, entrarán en conflicto y caos. Dios no te pondrá en una posición donde no puedas dar a tu familia lo que necesita, pues su diseño ha sido siempre que la mujer esté al frente de su casa como su mayor prioridad.

Tu mayor esfuerzo debe ser hacia tu esposo para brindarle tiempo y dialogar. Para ministrarlo, servirlo, bendecirlo y animarlo. Tal vez haya algunas cosas en tu agenda que necesitas evaluar, tal vez sea un momento para enfocar tu mayor energía física y emocional hacia tu familia.

basado en un articulo de https://www.avivanuestroscorazones.com/