El matrimonio está bajo ataque. El matrimonio
siempre ha sido objeto de ataques. El mundo, la carne y el diablo están todos
firmemente opuestos al matrimonio, y sobre todo a los matrimonios que son distintivamente
cristianos. El matrimonio, después de todo, es dado por Dios para fortalecer su
pueblo y para glorificarse a sí mismo; poco se extrañe, entonces, que sea
constantemente un gran campo de batalla.
He estado pensando recientemente acerca de algunos
de los enemigos más importantes del matrimonio cristiano y, en definitiva, los
enemigos principales que veo trepando para atacar mi propio matrimonio. Aquí
hay 6 enemigos mortales de matrimonio, y el matrimonio cristiano en
particular.
El Descuido del Fundamento
El enemigo del matrimonio que se merece estar
en la parte superior de la lista es el siguiente: descuidar el fundamento
–descuidar el fundamento bíblico. La Biblia deja en claro que el
matrimonio es una institución decretada por Dios y una institución destinada a
glorificar a Dios, mostrando algo de él. El gran misterio del matrimonio es que
la relación de pacto de los esposos es un retrato de la relación de pacto de
Cristo y Su iglesia. El Matrimonio es de Dios, acerca de Dios, para Dios, y por
Dios, por eso descuidamos a Dios a nuestro propio riesgo. Es sólo cuando el
fundamento bíblico está en su lugar estamos en condiciones de entender
correctamente cómo un marido y esposa deben relacionarse, cómo van a asumir sus
roles separados, y cómo van a tratar de dar gloria a Dios, tanto individual
como con pareja. Construir el matrimonio en cualquier otro fundamento es
descuidar la roca a favor de construirlo sobre la arena.